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La revista Benchmark menciona el sensor TAKEX PR-30BE como la más efectiva protección a distancia.

Este sensor de alta tecnología utiliza la detección ToF (tiempo de vuelo), el cual mide el tiempo del haz entre la emisión, su reflexión del espejo y retorno al receptor.

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Los rayos infrarrojos basados ​​en reflectores ( transmisor y receptor en una sola unidad y el espejo reflector<otra unidad, que no necesita ser cableada) existen desde hace algún tiempo, pero no se utilizan con tanta frecuencia como los pares de transmisor / receptor.

 

 

Un problema con los pares de sensores es que si el haz o los haces son interrumpidos por un intruso existe la posibilidad de que el receptor reciba la luz infrarroja reflejada por una superficie brillante reflectiva u opaca que se torna en reflectiva cuando llueve y asuma que el haz o los haces directos no se han roto resultando una indetección.

 

 

 Es por ello que en los pares se indica que deben instalarse a 0,60/0,90mts de tales superficies reflectivas si la distancia de protección usada es de 50 mts. y para distancias superiores o de 100 mts. tal separación debe ser de 1,2-1,5mts., esta distancia es técnica pero por razones de seguridad la distancia mínima de un muro o un tejido perimetral debe ser al menos de 2 mts, si es mayor mejor, para evitar que el intruso desde el muro o tejido perimetral salte y pase por encima de los haces y no sea detectado.

Los dispositivos reflectores ofrecen la ventaja que se cablea solo una unidad (Tx/Rx en una sola unidad). Sin embargo, el riesgo de que se pierdan las activaciones es demasiado problemático para muchas aplicaciones, el PR-30BE de TAKEX cambia las cosas, ya que es un haz fotoeléctrico basado en reflectores que utiliza tecnología Time-of-Flight <TOF>(Tiempo de vuelo). La tecnología Time-of-Flight mide con precisión el tiempo que tarda una señal (en este caso, un rayo infrarrojo) en regresar a la unidad una vez que se ha transmitido. El dispositivo "aprende" el tiempo necesario para que el rayo se refleje y vuelva en condiciones normales. Si la señal no vuelve, o si se vuelve en una escala de tiempo diferente al tiempo de vuelo, se genera una alarma.

La tecnología Time-of-Flight ya se utiliza en el sector de la detección, generalmente con dispositivos basados ​​en láser. Por lo general, estos poseen un precio mayor que los haces fotoeléctricos, pero el hecho es que la tecnología de detección TOF se utiliza para aplicaciones de alto nivel de seguridad demostrando su idoneidad para este tipo de aplicaciones ya que asegura la detección por intercepción directa de sus haces y anula la no detección por haces infrarrojos reflejados por superficies reflectivas.

El PR-30BE tiene un alcance de 30 metros. Determina la distancia de cualquier rayo con un alto grado de precisión, ya que mide el nivel de recepción de luz y el tiempo, asegurando que no se pierdan alarmas genuinas. Esto elimina los problemas con reflejos no deseados causados ​​por superficies brillantes o blancas.

Debido a que el sensor no requiere energía en ambos extremos del enlace, los costos de instalación se mantienen bajos. Si los enlaces deben cruzar vías fluviales, carreteras o pistas, esto se puede lograr con una mayor rentabilidad. El sensor conserva el aspecto y el tamaño de un dispositivo de haz doble típico.

El monitoreo ambiental optimiza dinámicamente el rendimiento para adaptarse a las condiciones cambiantes, con una salida dedicada que permite una advertencia previa a la alarma si es necesario. Otras características incluyen ajuste del tiempo de respuesta, ajuste horizontal y vertical, y un conjunto reflector rediseñado que permite una distancia operativa mínima de 0,5 metros.

Para simplificar la instalación, el PR-30BE hace uso de una función de tono de alineación audible junto con un visor de anillo doble y opciones de voltaje de salida del monitor.

Los sensores fotoeléctricos basados ​​en reflectores ofrecen una serie de beneficios. Con el uso de la tecnología Time-of-Flight (TOF), el PR-30BE de TAKEX también ofrece mayores niveles de seguridad para garantizar que no haya compromisos en términos de rendimiento de captura.

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